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- 28 de mayo de 2022
Unos 2.000 inmigrantes la mayoría de procedencia iraquí y siria se niegan a abandonar el centro de acogida para ser repatriados, su objetivo final es cruzar la frontera y entrar en la Unión Europea.
Muchos de ellos con familia en Alemania no han podido obtener el visado, sobre todo debido a la pandemia de coronavirus. El presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, ha pedido la apertura de un corredor humanitario para los inmigrantes. Sin embargo, Bruselas le acusa de usar a estos como arma política debido a las sanciones impuestas contra el gobierno.
“Todos los días tenemos que hacer papeleo para aquellas personas que solicitan a las autoridades bielorrusas ser repatriados. Ayer, 118 personas abandonaron el país en avión“, ha asegurado Alexei Begun, jefe del departamento de migración.